viernes, 10 de junio de 2022

Aquí no hay quien viva

Tomado de https://www.lamag.com/mag-features/alpine-county-gay-liberation-front/

Mi plataforma creativa va de hablar sobre el colectivo LGBTIQ, la identidad de género y, por lo tanto, de las violencias que vivimos quienes nos identificamos dentro de ella. He llegado a pensar que no me gustaría escribir solo acerca de estos temas (en realidad, siempre escribo de muchas más cosas). Sin embargo, conforme pasan hechos de discriminación y de cruda violencia, más corroboro lo importante que resulta hacerlo.

En nuestro país, este año se han presentado actos violentos en contra de hombres gay, y los de siempre en contra de mujeres trans. Estos actos hablan de cuerpos que han sido torturados hasta causarles la muerte. Pasar por alto estos crímenes es obviar: que se está dando una especie de persecución en contra de comunidad diversa, pues los casos no son aislados (aunque se hayan dado en ciudades y en fechas distantes); y que todo obedece a una motivación de odio que busca erradicar a las personas con identidades no hegemónicas, como si se tratara de una plaga.

La cuestión de que a la fecha casi el 95% de las muertes en contra de comunidad diversa se mantengan impunes, es muestra de lo irrelevante, que resulta para la sociedad, la violencia y el odio en contra de comunidad LGBTIQ. Lo que además es respuesta de la falta de consciencia acerca de la vida de las otras, otros y otres, de la falta de cuidado que se tiene hacia la vida de cualquiera.

Esa barbarie en Colombia es comprensible, teniendo en cuenta que a diario asesinan líderes y lideresas que luchan sin descanso por sus comunidades. Esa falta de empatía es comprensible, pues a la fecha han muerto aproximadamente 900 niñas y niños en nuestro país. Sí, aquí, en nuestro país. Donde a diario, dentro de las mismas familias, vecindarios, comunas, barrios, calles, instituciones públicas o privadas, se persigue y se señala a quien se muestre contrario a las políticas de control social y económicas.

Esa misma violencia por prejuicio se presenta en los países del primer mundo. Los crímenes de odio no excluyen la cultura avanzada o el desarrollo económico de las naciones. Donde no encarcelan, ahorcan frente al pueblo a quienes no alcanzan a esconderse de las prohibiciones que se proclaman en varios países fóbico-diversos, con el fin de exterminar a quien cruza las fronteras de lo heteronormativo.

Nacer diferente y decidirse abanderarse de lo monstruoso, por acuñar al filósofo trans masculino Paul Preciado, o a la poeta trans chilena Claudia Rodríguez, debe ser motivo de orgullo y gallardía, de coraje e intrepidez, puesto que acá mientras unos te aplauden la valentía de ser, otros aceptan tu diferencia por lástima; o, en otras instancias, te añaden a sus grupos porque les sirve como bandera de inclusión. Todo es de dientes para afuera. Ese es el altruismo con el que se mueven muchas personas a nuestro alrededor.

Es comprensible, si partimos de la idea de que quienes nacemos diversos, somos educados de tal modo arbitrario, que al presentarse la disyuntiva de una identidad desconocida en nuestras vidas, llegamos a rechazar lo que somos. Y, en esa medida: cómo exigir el respeto de parte de quienes, ni siquiera a diario, viven la reconstrucción del ser, pensar o hacer con el que han sido criados (es tu problema estar dentro de esta generalidad). Y, aunque pueda ser difícil, tengo claro que es imprescindible aportar para vivir buena parte de lo que solo se considera una utopía. O, sino, al menos abrir caminos de libertad para el futuro.

P.d. A la fecha vivo parte de la utopía pues muchísimas personas LGBTIQ, históricamente y en la actualidad, han aportado desde diversos frentes a que personas como yo vivamos un “paraíso”. A todxs ellxs: millones de gracias.


martes, 29 de junio de 2021

Icaro el náufrago

Afiche de la obra para el Encuentro Nacional de Arte Queer

1. Fue la segunda obra presentada en el Encuentro Nacional de Arte Queer, organizado por el Teatro del Presagio. Me conecté con sus fragmentos, que el mismo artista explicó surgieron de haber soñado haciendo maromas en un circo y en otro en el que se encontró con Greta, que en la obra desentierra para que cobre vida en su cuerpo en una especie de posesión. Así, Icaro, muestra su proceso, su forma de vivirlo, de llevarlo, de encontrarse con su femenino. Lo que me lleva a pensar que cada cual se indaga también de formas diversas.

2. También, cada cual da nombre a sus monstruos. Quién lo hace claro está. Hay quién les teme y los evita. Aquí la resistencia cobra dos significados: uno que es el de soportar hasta entender, es decir resistir, soportar el dolor de aquello que nos desborda por incomprensible y que nos lleva a cruzar nuestros propios límites; otro, que está en la negación de ver, de escucharse, es el acto de resistirse a lanzarse al vacío, a oradar la herida, es decir: resistirse a resistir.

3. El arte entonces desde una perspectiva  autoficcional y compuesto en el performance -un acto presente-, dirige la conciencia hacia la sanación, disfruta el repetir la herida, labrar la cicatriz para abrirla y cerrarla, naufragar dentro de ella. La forma, el proceso, el acto de cada cual siempre cumplirá el objetivo de brindar una nueva visión del dolor, del sacrificio, del sufrimiento, de la negación.

4. Así en Icaro, todavía está la huella de Greta, aunque se despida de ella, de Greta, quién pareciera ser su monstruo, hacía el final de la obra. Pero, contradictorio, en el acto de repetir la despedida en cada función, disminuye la distancia y la acerca. Cada hombre en el mundo debería temerle cada vez menos a su Greta, a su femenino. Que es lo que debemos hacer todas las  personas, sobre todo hombres independientemente de nuestras identidades, pues nuestro femenino ha sido castrado por siglos, nacemos y ya está castrada nuestra feminidad. No hemos nacido y en el vientre ya están determinando cómo deberemos ser al nacer si es que nos identifican los genitales en la identidad.

5. Lo bello de Icaro el náufrago, es reconocer que podemos ser femeninos en esencia revestidos en un cuerpo viril o masculino. Y, en esa misma medida, también podemos ser masculinos revestidos en un cuerpo femenino. Habrán incluso muchas más características posibles, plausibles y tan certeras y claras como cualquier otra. El cuerpo entonces tiene la libertad de ser como quiera después de que el interior refleje sus verdaderos y sinceros deseos.

viernes, 18 de junio de 2021

Pero estaremos bien...

EyeVoted_JesseKirsch

El Estado irrespeta las vidas,

pisotea la dignidad del pueblo,

con disimulo denigra

fomenta el autoflagelo

El estado detona las heridas,

Calcina e incita.

El estado vuelve y abre las mismas heridas.


El estado solucionará la misma guerra que creó.

Se ocultará bajo la máscara de benefactor.

Se promulgará por las injusticias cometidas:

maquillará de asfalto las calles,

erigirá esculturas en honor a los mártires,

desollará las grietas de lágrimas para convertirlas en manantiales.

Manantiales, donde "con seguridad", nos tomaremos fotos de recuerdo.


El estado limpiará la sangre con discursos.

El estado sabe lo que hace y poco le importa.

El estado es el verdugo perfecto

Y desconocemos el punto en el que escogimos el verdugo.

De verdad desconocemos el punto en el que elegimos el verdugo.

Quizá nos salvemos -"nos salvarán"- y vendrán otras guerras

y seguiremos desconociendo el por qué preferimos un verdugo a otro verdugo.

E ignoramos cuál y olvidaremos el dónde.

E ignoramos cómo y olvidaremos cuándo

Será el fin del verdugo

que pone cara

linda cara

buena cara

de benefactor.

 

p.d. ¿ya inscribió su cédula?


martes, 15 de junio de 2021

Nunca se sabe a la madrugada

Ilustración de Johan Valencia
 

Por, José Vazul

(Fragmento del Cuento, publicado en el libro de cuentos Madonna También es Lenta).

Despierto asustado de una pesadilla. Con el sabor metálico que siento, recuerdo el empalague que producen los altos niveles de grasa en mi estómago. En el sueño una voz me sembró una inquietud severa: “el hilo de la creatividad se agota, la escritura termina”. Decido ducharme, limpiar la melaza que preserva mi cuerpo dentro de la burbuja que acaban de extirpar, y por alguna razón el agua me trae el recuerdo de mi ex. Creo que un jugo de cuatro mandarinas con hielo distraerá las ganas que tengo de cuerpo.

Son las 3 am. En mi habitación recojo el portátil, el mouse y los auriculares para ir hasta la sala de la casa. Allí la luz les evitará molestias a los cuartos vecinos. Mis manos necesitan trabajar: un poco de escritura volátil, porno y chat por si resulta algo más que una buena paja.

Inicio enumerando las posibles causas que dañan mi sueño: noche de cervezas y bla-bla-bla con mi mejor amigo, David; la grasa de las alitas apanadas que comí con él; la conferencia que este dio sobre las etapas del Alzheimer; el bochorno de la madrugada; haber terminado con mi ex, Paula. Nada qué hacer, lo sabía, era tardísimo para la digestión  y puede ser que confunda la pesadez con la ansiedad sexual.

Al abrir los ojos, asustado por la pesadilla, lo primero que pensé fue que mi capacidad comunicativa se irá al trasto y empezaré a despedirme de las palabras, una por una. Y, recuerdo que la voz del sueño, no dejaba de azuzarme repitiendo: “el hilo creativo se agota-el hilo creativo se agota-el hilo creativo se agota”. La pérdida de la memoria sintáctica, fue la parte más difícil de comprender en la conferencia de David. Eso no fue para nada justo: “perder la memoria sintáctica es como entrar a la casa de alguien y ver que todo flota sin chocarse hasta desaparecer” (¿agujeros negros en el espacio real terrestre?, no sé); “como embolatarse en la luna, como una mano que sin permiso entra a tu cerebro para arrancar y arrugar las neuronas que luego tirará a la basura” (más o menos ir sacando cero en lingüística); entonces, ¿para qué molestarse en aprender? Y, David, cerró la idea: “Las palabras se marchitan como las flores que relucen a media agua preservadas en un cristal”.

A pesar de todo, supe esquivar la bateada para escuchar con atención el resto de su charla. Me parecía que hablaba de personas que van cayendo por un abismo o que están sentados en el borde en un estado perenne de desolación, o que a su vez van desmadejándose en la caída, desconociendo al tiempo, el abismo y la caída.  Algo así, como morirme frente al computador sin alcanzar a eyacular por última vez.

La sensación de angustia me devuelve al presente e intento convertirla en escritura para embolatar el insomnio procrastinando con porno y chat: tetas ateridas de frío, dedos lubricados en saliva entrando en vaginas pulposas, culos vibrando.

Ya no intento lo de leer para coger sueño. Cuando el frío me despierta, sólo con abrigarme es más que suficiente para seguir durmiendo. Todas las razones juntas pueden causar una alarma emocional contundente. Ya sé que al deseo no lo sacio a punta de pajas o mordiéndome los labios. También, sé que la decisión con Paula fue rotunda como para insistir llamándola. De un descuido a otro. De un olvido a otro. La relación con ella siempre fue inestable. Está bien, está bien, me confieso: he sido yo quién le ha dicho: no va más, no sé de qué va esto contigo, yo lo siento en verdad. Ella ni se inmutó, le facilité el camino para cumplir algo que le daba igual resolver.

La sensación de mi corazón acelerado me vuelve monotemático ¿Por qué la pensadera no se da en otro momento del día? Mi cabeza se carga de sucesos inesperados sobre los que nadie ha pedido reflexionar. Si me dejo coger por el susto, me veré viajando en un bus escolar deteriorado sin vidrios en las ventanas, en el que me acompañan uno que otro zombi que come sus propias vísceras. Genial, adiós desodorante, ropa sucia, cepillo de dientes y seda dental; hola nicotina por montones, café, disminución del apetito. Amo esta ruta. No hay quién frene la mente. Con el hilo creativo se pueden ir los besos que no llegan; y, la paja, es el mejor remedio para quedarme seco y dormir. Las últimas imágenes, consciente antes de quedarme dormido de nuevo, serán por montones: tetas ateridas de frío, dedos lubricados entrando y saliendo en vaginas pulposas, vibradores que hacen gemir, culos rojos de nalgadas, chorros y más chorros contra la pantalla del portátil, mis dedos tecleando, mi boca sudando. Extraño el olor de sus cuerpos y lo peor que puede pasarme es que el frío mengüe este calor.

Decido relajarme y de pronto masticando un hielo aparece un duende que apaga el interruptor de mi procrastinación. Decido conectarme con mi lado oscuro. El chat ilumina de blanco mi rostro y por fin una chica me sigue el juego: Dama Nocturna, decide invitar a su casa a Noctambulo Ardiente. Doy ctrl+G al texto en Word, y me concentro total en el presente, luego de una breve charla de urgencias sexuales con archivos adjuntos y un video en vivo: sus pezones sobresalen tiernos y duros como mis tetillas ¡qué rico!; me muestra su rostro angelical, perfecto; mis tetillas empiezan a sentir que quieren sus mordiscos; es delgada pero carnuda; mis manos se tensionan de estrujarme la polla roja de emoción; su lengua moja labios carnosos, mi boca desea devorarla; me envía de nuevo foto de teticas, re envío foto de polla lubricando a punto de estallar; después, le digo que deseo un primer plano de su vagina, de su rajita, que delicia; espero y mientras tanto le envío primer plano de mi cara de lobo queriendo devorarla a lengüetazos; primer plano de mis manos apretando la polla ensalivada, ritmo, ritmo, ritmo. Su cámara se desliza pasando por el ombligo hasta que llega a una polla carnosa y empiezo a jadear en teclas; ella escribe un ¿vienes? Yo un ¡Sí, de una! Y queda claro lo sediento que estoy. Sugiere que lleve algo de tomar como para aflojar más rapidito. Y, no sé por qué ya listo para arrancar en mi carro, descubro que he decidido llevarle sólo unas cuantas mandarinas.

viernes, 4 de septiembre de 2020

MADONNA TAMBIÉN ES LENTA (LIBRO DE CUENTOS LGBTIQ+)

 

Ilustración de la Carátula por Dayhana Muñoz
Ilustración de la Carátula por Dayhana Muñoz


PRÓLOGO

Con un estilo propio, José Vazul cuenta las historias en Madonna también es lenta, su primer libro de cuentos. Cuando leí estos, me encontré con la particular característica que tiene de tomar aspectos del mundo real para recrear sus personajes, las tramas y los paisajes urbanos. Los personajes, por ejemplo, pueden llegar a ser la expresión viva de cualquiera de nosotros envueltos en situaciones, que por absurdas o cargadas de fantasías que se vean, no le serán ajenas a ninguno de los lectores. De ahí que esa combinación entre lo real o lo ficticio, lleve a que viajemos a nuestro mundo interior por medio de imágenes que vislumbran las diversas formas de pensar, de sentirse y de verse.

Ya en su poesía y en el teatro que ha escrito, deja traslucir el interés que tiene por narrar o poetizar los conflictos del ser y su identidad. En este libro lo hace viajando por su ciudad, por Cali. Entonces, pasa que cuando desea nombrar los espacios nos hace saber que estamos por la Avenida del Río, la Avenida Sexta o rumbeaderos como Mi Kasa Bar (que ya no existe), el lago de la Universidad del  Valle u otros. En ellos aparecen sus personajes expresándose y desenvolviéndose con una particularidad pacífica y densa al mismo tiempo. Cuando no tiene la necesidad de nombrar barrios o sitios nocturnos parecidos, las calles o cuadras se vuelven una con la trama, y saca provecho de los paisajes sonoros, visuales y sensitivos, para contar las historias de personajes que se transforman en la noche, dejándose llevar por el instinto animal de sus excesos y pasiones, sobreviven en el ocio y sacian su apetito voraz por sentirse vivos, por hablar desde la profundidad de sus complejidades, con el deseo ferviente de escapar de la monotonía de una ciudad esclavizada bajo la luz del día.

Estreno de Madonna en Oromo Café
Promo en el periódico del País
por el Lanzamiento del Libro
en Oromo Café


Quizá, porque conozco a José Vazul, me atrevo a decir que él se cuenta a través de estos 13 relatos. En conversaciones que hemos sostenido, manifiesta cómo sus vivencias estallaron sus letras y algunos de los personajes se convierten en su alter ego o en una analogía efímera de sí mismo, de amigos, familiares y vecinos. Por eso, siendo docente de literatura, no es gratuito que en el cuento Calzarse Dormida, haya una profesora que sufre adaptándose al sistema laboral del nuevo colegio en el que trabaja; o, veamos un hombre desvelado en Nunca se sabe a la Madrugada.

También, sus relatos son el pretexto para expresar el disfrute de lo simple y de lo atractivo de las fantasías. Es por eso que sus personajes, en la mayoría hombres gays, pasan por una conversación sencilla como sucede en Tom Vallejo, hasta por una follada agreste en un lote baldío en medio de la oscuridad, como se narra en Perro hombre; las alucinaciones y el enamoramiento, en medio de unos plones a un cigarro de marihuana entre un par de chicos; o, la soledad de un cincuentón fetichista que busca jovencitos o uniformados; todos estos hombres, que en definitiva, se atreven a disfrutar la belleza masculina.

De pronto, aparece una mujer atrapada en la rutina de su día a día. Para seguir con un artista que castra hombres para crear una obra de arte. Así mismo, nos cuenta la historia de una relación basada en el poliamor; o, la de una tortuga llamada Madonna, que pareciera ser el símbolo de la lentitud y de la dificultad del desapego en las relaciones. En otra, un hombre va olvidando a qué sabe su vida, mientras nos recreamos con personajes noctámbulos como Lucía, que vive fantaseando con los hombres; o, con un joven que para pasar el insomnio, se levanta a escribir, a ver porno y a chatear con webcamers a la madrugada; o, con Carlos, Isabel, James y un cuarto personaje que podría ser un alter ego de Vazul, que después de una noche de drogas, licor y rock and roll, sostienen una conversación que va y viene de lo sexual a lo relativo. Sin dejar pasar al punketo, que le gusta fumar, beber y que le den por el culo hasta que le flechen el corazón.

Todos estos son los personajes reflexivos que invaden a Madonna también es lenta. Para ellos, lo importante es el aquí y el ahora, alimentar el impulso del momento.

 

Andrés Jiménez

domingo, 17 de mayo de 2020

Plata Quemada (Reseña)


La primera vez que vi Plata Quemada me impresioné con la belleza de sus actores. La interpretación de estos es tenaz, crean un mundo interior potentísimo en sus personajes, trasmiten la decadencia del encierro obligado, de la represión, del delirio y la ambición. La primera escena que se me viene a la cabeza es la de El Cuervo follando con su novia y son vistos por El Nene en pleno acto. Este morbo que nada tiene que ver con la historia principal me acelera, una película porno es una guarrada al lado del erotismo que despiertan las cercanías entre El Nene y Ángel, los personajes principales.

En esta ocasión, como la quinta vez que la veo, recordé la segunda vez que volví a ella. Al terminar cogí mi bicicleta rumbo a la Vía Panamericana. Eran más de las diez de la noche. Debo decir que en la época de los veinte años viví una depresión por algún rompimiento amoroso y encontrarme con una historia en la que el amor gay no era fructífero, sobre todo por el contexto de los dos protagonistas, me volcó toda la mierda a los ojos. Durante el pedaleo constante y con furia no pude dejar de llorar de rabia por la dureza de nuestras personalidades, de la sociedad en la que vivimos y crecimos. Lo bueno, es que esto ya no es una carga, pues las luchas también tienen un principio y un final.

El de ellos es un final de película, claro está, pero que sucedió en la vida real, un robo histórico que deja su marca hasta en el cine. Todos mueren, hasta el dinero, que si no es para Dios menos será del Diablo. Para Ángel mueren las voces apocalípticas; para El Nene, el amor por Ángel; en Cuervo, la ambición; para Giselle, la posibilidad de un amor. Fontana es el único que toma una decisión sabia antes de la guerra, que los delincuentes vivirán con un juego de niños.  

Plata Quemada, siempre será un referente del cine gay al que volveré. En esta ocasión debido a la mala señal del internet, hemos vuelto a películas viejas, al CD, al DVD, a la TV análoga y caímos en ésta. En Relatos Salvajes, también y en otras (geniales), que no es tan vieja, en la que aparece ya veterano Leonardo Sbaraglia, que es toda una pinta de actor.  A mí me queda de tarea ir a la novela. Si alguno no la ha visto, se la recomiendo para que se escape un rato de Netflix y busque este increíble filme.

Director: Marcelo Pyñeiro
Adaptación de la novela homónima de Ricardo Piglia.

miércoles, 25 de marzo de 2020

El Hoyo

Imagen tomada de "La Republica" (Perú)

Dirección: Galder Gaztelu-Urrutia
Reparto: Iván Massagué – Zoiron Eguileor – Antonia San Juan – Emilia Buale – Alexandra Masangkay – Eric Goode – Algis Arlauskas – Miriam Martín – Oscar Oliver.

Aprovechando que una amiga preguntó en su muro en Facebook, sobre si habíamos entendido -obvio, claro que no es obvio- el final de El Hoyo de Netflix, escribí la siguiente reflexión a partir de su final. Les comparto:

El final es una chimba. El mensaje es la niña. Ella misma será la respuesta para todos los que están en esa guerra del hambre y la jerarquía dentro de esos niveles al que han sido confinados. Ella misma, que sobrevivió tanto tiempo, mientras su madre se vengaba o se defendía en el transcurso de la búsqueda, desde de su desaparición. Así mismo nosotros en la vida real en donde estamos confinados al encierro debido a una peste (la naturaleza del planeta actúa sola para limpiarse), por andar de competencia en competencia, encarnados en el ego y el hambre de éxito.

La niña es el mensaje. Y, El Quijote, Goreng, es el protagonista -hermoso, caritativo, humano- fue el único que guardó la esperanza de salir del hoyo de mierda en el que han caído todos ellos que semeja una cárcel o moderna Babel. Tanto él como nosotros, nos hemos tenido que manchar para aprender a reconocer nuestras virtudes. A la niña no, por eso la niña es el mensaje, su alma está limpia, nada la ha permeado para mantenerse viva. El Hoyo, es uno de los espejos más fieles que ha construido el cine para nosotros, así como Parásitos o Joker. El Hoyo, es una película excepcional".

Cuando terminé de verla me desenchufé. Me quedé perplejo. Sabía que ni siquiera debía opinar algo. Cuatro días después me permití escribir y sabía que El Hoyo me había enseñado a pesar de su transito "gore" para dummies (otros podrán decir que fue fuertísimo o que ni siquiera le pega). Lo demás es pura abstracción.

miércoles, 2 de octubre de 2019

Érase una vez en Hollywood (Reseña)



Bastante larga, sí. Las escenas que hacen homenaje al Western podrían ser menos y cortas; y, tener más de esas escenas rápidas que cuentan la historia de cada personaje. Claro que sería otro director de no ser por la largura, la intensidad y el honor que Tarantino siempre le hace al cine clásico. A algunos cercanos les he escuchado decir que les faltó ver sangre en cada escena, gesto tan reconocible en cada trabajo de él; sin embargo cuando Brandy ataca a Tex y a Sadie uno siente que es oportuno, que los golpes con los que se defiende Cliff son suficientes y que el lanzallamas que enciende Rick para acabar con la hippie zombi, refrescante.

Si bien es cierto que Tarantino siempre escoge un bando al que favorece, en Erase una vez... el bando es comedia, pues irse lanza en ristre contra los Hippies, de esa y todas las épocas, era necesario para fortalecer el argumento de que las ideologías son contradictorias, creer todo lo que dice la TV insano y que seguir a un psicópata por mero resentimiento imprudente. Por eso la importancia del simbolismo de una invasión hippie llena de mujeres que gobiernan y aprovechan el falo de un par de hombres jóvenes y el de uno venido a menos por la vejez y la ceguera.

Aunque su bando prevalente haya sido el de los artistas Hollywoodenses, también en ellos está la muestra simbólica del exceso de fama, de vanidad y de excentricidad. Sin embargo, de estos, la tranquilidad de la dedicación, la búsqueda incansable de los sueños y el éxito como resultado de un trabajo bien realizado.

domingo, 28 de abril de 2019

Del hacer con respeto y entrega. (R. 25)



No puedo consentir el tener que pagar por un privilegio al que tengo derecho por naturaleza. Por muy escasos y limitados que sean mis talentos, yo existo, y no necesito el testimonio secundario mío o de mis compañeros. Todo lo que debo hacer es aquello que me concierne, no lo que los demás creen.
“La Confianza en sí mismo” Ralph Waldo Emerson.

Que el cielo glorifique a quien un día muertx de hambre preparó unas lentejas al carbón. Inlcuso, que el universo honre a quien volvió a la batalla y se atrevió a invitar a otrxs a un almuerzo cocinado por sus propias manos.
José Vazul.


He encontrado que muchos autores son profesionales de otras carreras o sin más se formaron en la universidad de la vida. Algunos vienen del periodismo, que es cercano al mundo literario. Otros llegan insaciables de escritura de profesiones como la medicina, las ingenierías, las ciencias, la filosofía o la psicología. Ninguno tuvo que sacar un cartón para ser bien recibido y convertirse en clásicos literarios o betsellers. También, habrá otros que se especializan en el campo de las letras u otras áreas; y se evidencia, no por regla general, la necesidad de encajar en el sistema o de conseguir la aceptación de los virtuosos para demostrar lo que se sabe ocultando que no se sabe. 

Por lo tanto, comprendo que en el teatro sea difícil recibir a alguien que no se ha titulado de un estudio de mínimo 5 años. Incluso, detallo con tristeza que en el gremio mal se ve al que ha estudiado sólo 2 años para ser actor y ni qué decir de aquellos que sólo vemos uno que otro taller que se oferte por ahí. Lo comprendo sobre todo porque es difícil vivir de hacer teatro. Por eso, tengo claro que no será un cartón lo que me capacite para decidirme a experimentarlo.

Yo mismo me pondré de ejemplo, pues haberme graduado de Literatura no es lo que me ha hecho un escritor. Y, a pesar de que todos en el mundo del arte sepamos esto, vivimos de señalar el recorrido de los otros. De ahí que, muchos estudien carreras a las que deciden no dedicarse para labrar camino en otras rutas. Así veremos arquitectos dedicados a la docencia, abogados presentando noticias, zootecnistas como reporteros, cantantes de pop actuando. Por ahí sé de un escritor que vive de su miscelánea y de una actriz que en buena hora es excelente pintora.

Está bien eso de que no todos gozamos de la afortunada ventaja de ir directo por nuestros sueños. Por diferentes argumentos –validos o inválidos- hay quienes divagan, huyen, retroceden y hasta se retiran cualquier día para llevar una vida simple. Muchos tendrán algo que decirles, sin embargo son a los que menos se deberá escuchar, sobre todo si lo dicen llenos de verdad y bellas frases ajenas.

He aprendido que la aprobación sobra para cumplirse a sí mismo haciendo lo que se desea. Eso sí, con respeto de todos aquellos que son profesionales y llevan años entendiendo su voz y su cuerpo para construirse en la escena. Por eso agradezco aprender en el hacer, pues entiendo que no es lo mismo aprender para hacer y menos vivir de la aprobación de las calificaciones que te permiten acceder a un cartón
; menos lo será vivir de las ovaciones y aplausos que sobrecargan a los que menos de vanidad. Es claro que todo aprendizaje requiere disciplina y responsabilidad. Además, corresponde por deber moral, que uno vaya más allá de lo pedido. Digamos que vine a explorar y la curiosidad es un factor indispensable para escribir, actuar o para sacar adelante todo lo que uno se proponga. Y, me honra, porque hay muchos artistas que poco hacen contradiciendo su propia sensibilidad. 

Aprovecharé la oportunidad de que manos amigas cuenten conmigo para trabajar en las tablas. Sería un agravio rechazar el placer de hacer teatro, a sabiendas de que me ha enseñado a ser más consciente de lo escrito, de una forma diferente de cómo lo plantean las escuelas de letras. Que loco que la academia o los teóricos nieguen o desconozcan –no todos- la posibilidad de ser de otras formas ¿qué habrá en contra del cuerpo que se obvia tanto del aprender a escribir? Yo he sido incapaz de cerrarme a la banda para evitarle a mi espíritu la libertad de ser. Por eso, me esfuerzo para salir de forma arriesgada de la jaula. De ahí para allá, tendré cosmos, cielo, tierra, mar y otras profundidades que andar para rato.

sábado, 9 de marzo de 2019

LA VOLQUETA DE ÁNGEL (Versión Micro)


COMUNICADO DE PRENSA


Cuaderno de Notas – Laboratorio Teatral, invita a la variedad de funciones que tendrá la Micro Obra La Volqueta de Ángel, en la Temporada # 28 de Espacio Tdesde el 21 de febrero hasta el 23 de marzo, todos los jueves, viernes y sábados de 8:00 a 11:00 pm, en la sala 3.


Sinopsis de la obra:


Alicia, celebra el cumpleaños de Ángel a lo grande. Los invitados a esta fiesta se montarán en la volqueta del niño para descubrir en medio de sus juegos los secretos de este hogar tan peculiar.
La Volqueta de Ángel, nos acerca a la dificultad de crecer siendo diferentes desde la niñez y cuenta como desde la crianza se nos está condicionando para cumplir con los roles fijos que ofrece y necesita la sociedad. Para esto el sistema utiliza a la familia para condicionar a los seres humanos conforme a sus parámetros, negando el derecho a la libertad de ser de cada quien.

Director: William Andrés Jiménez Muñoz
Sonido y luces: José Rodrigo Valencia Zuleta


Disfruta de todas las Micro obras y vive una noche de teatro inolvidable.
Sala 1 LA DEFENSA
Sala 2 ALELUYA


DIRECCIÓNCLL 6 # 4-32
INFO RESERVA316 8149202

Agradecemos toda la difusión que logren hacer de nuestro trabajo. Dejamos el contacto directo para cualquier información del grupo y de la obra: 

WILLIAM ANDRÉS JIMÉNEZ MUÑOZ
Director Cuaderno de Notas - Laboratorio Teatral
CEL: 317 694 6037